Galicia se percibe fuera de nuestras fronteras como un territorio con una fuerte identidad, esto no es un hecho fortuito, ni un trabajo de dos días, esta realidad tiene que ver con nuestra cultura, con nuestra forma de ser, nada en esta tierra es irrelevante, y por eso nada llega a formar parte del olvido colectivo..
En cada ciudad, en cada aldea, en cada casa... las historias, las leyendas, las tradiciones, curiosidades, canciones, ritos, la lengua, las creencias, los refranes .. se atesoran y coleccionan, se transmiten entre generaciones de manera natural y espontánea -y en muchos casos, no son necesarios el calor y la luz de una "Lareira" o un abuelo de cuento relatando, para que resulte más real, más gallego y más enorgullecedor- el Adsl y Iphone4 también han llegado al rural, aunque muchos no se hayan enterado-.
La memoria colectiva gallega es infinita, y no hay nada, como sentirnos comprendidos.
Esta identidad de Galicia, que se se traduce en el propio territorio, el clima, la gastronomía, el carácter de su gente, el patrimonio natural, cultural, arquitectónico, histórico.. y sobre todo el patrimonio inmaterial (esta memoria colectiva de la que hablamos) resulta, como es lógico, muy atractivo para muchos viajeros... las matemáticas, nunca han sido lo mío, pero entiendo que sumar esta realidad a otra realidad que pone de manifiesto que en la sociedad actual todo se compra, todo se vende y por lo tanto todo tiene su precio, puede poner en riesgo tantos años atesorando ideas, realidades vividas o soñadas.. ¿somos todos conscientes de la fragilidad de esta herencia?
Quien quiera que lo entienda, como reflexión filosófica, quien quiera como análisis económico, sin esa Identidad estamos "fuera de mercado".
Natalia.
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